La Iglesia Trabajando Unida en la Diversidad

“Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo”. 1. Co. 12: 12

En la Biblia se usan varias figuras o analogías para describir a la iglesia, una de ellas es el cuerpo, al estudiar esta figura podemos aprender algunas cosas veamos

A. LOS MIEMBROS DE LA IGLESIA TENEMOS DIFERENTES FUNCIONES. (Ro. 12: 4)
“Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función”

Esta figura nos recuerda que nuestro cuerpo, tiene diferentes órganos, incrustados en el cuerpo para que el hombre viva, órganos que cumplen diferentes funciones, al igual en la iglesia, los dones tienen diferentes funciones, el pastor tiene diferente función al maestro de escuela dominical, el maestro de escuela dominical diferente función al director de coro, el director de coro diferente al presidente de jóvenes, pero debemos recordar que somos parte del cuerpo de Cristo, a pesar de la diversidad de funciones debemos coordinar y desarrollar nuestra talento ministerial, no en forma aislada, ni en forma particular, sino desarrollarla coordinadamente con los demás ministerios, no desarrollarla pensando que es mi trabajo, mi ministerio, sino que trabajamos en el ministerio de Cristo, llamado Cuerpo de Cristo que debe funcionar de forma unida.

B. COMO CUERPO DE CRISTO SOMOS DIFERENTES. (1. Co. 12:12 a)
“Porque, así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros…”

La iglesia también se compone de diferentes personas, en edad, experiencias, costumbres, ideas, gustos, apariencia, ubicación de vivienda, profesiones diferentes, cosmovisiones de la vida diferentes, conocimiento diferente, por ello debemos evitar que nuestro trabajo se desarrolle en forma individual, no desarrollar el ministerio con un espíritu de superioridad, creer que todo lo sabemos o que solo nosotros sabemos todo.

Por el contrario, tampoco trabajar con un sentido de inferioridad; creer que nuestro trabajo no tiene valor, la Biblia enseñan que Él nos llamó como somos, con nuestra particular personalidad, pero para que podamos trabajar unidos, sabiendo que no es un trabajo cualquiera, sino que estamos trabajando en el ministerio de Cristo, el cual es único, tiene el propósito único de que todo el trabajo ministerial sea de glorificar a Dios, trabajando no independientemente, si no en forma coordinada a los demás ministerios.

C. SOMOS LLAMADOS A TRABAJAR UNIDO EN LA DIVERSIDAD. (1. Co. 12:12b)
“pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo…”

Siendo diferentes y teniendo diferentes funciones por el talento que Dios no ha dado, nos hace el llamado a trabajar en la iglesia en forma conjunta con otros ministerios, con el objetivo de glorificar a Dios, ese el propósito final elevar el nombre de Cristo, no el nuestro, lo cual implica que debemos quitar de nosotros frases como “Mi Ministerio” “Mi talento” “ Por mi trabajo todo tiene éxito” “Sólo yo puedo hacerlo todo” “Sin no lo hago yo, nadie lo puede hacer”, o pensar lo opuesto que lo que hago “No sirve” “No tiene Valor”, por el contrario recuerde lo que el Apóstol dijo al inicio del escrito de corintios,

1.-Co 1:30-31: “Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor”.

Trabajando con el reconocimiento que el trabajo es del Señor, mis talentos son dados por Dios no para gloriarme yo si no glorificar a Cristo.

Cumpliendo lo que indica el pasaje siendo muchos somos un solo cuerpo, en Cristo.