El año que se fue, y el que comienza

Gracias Señor por todo lo que me diste,
por los días lindos y las noches tristes;
por los tiempos tempestuosos,
y por las horas serenas;
por los brazos cariñosos de las almas buenas.

Gracias por los tiempos rebosantes,
Y las ocasiones de quebrantos;
Gracias también por soportarme tanto.

Por darme una familia, un techo,
el abrigo y el sustento.

Gracias por lo que me prestaste,
y que luego me pediste.

Gracias por las flores, la luna y las estrellas,
por la sonrisa de los niños y por las manos bellas;
gracias por la variedad de sentimientos,
gracias por permitirme también los sufrimientos.

Gracias también por el año que comienza.

Que me des más fe, para mirar tu gloria;
fuerza para no deprimirme en nada;
coraje para agradarte siempre,
disposición para servirte en algo.

Gracias por ayudarme a amar,
aun teniendo el alma herida;
gracias por darme lo que me conviene,
y no lo que yo te pida.

Gracias por tu bendición que con fidelidad me viene;
y por hacerme útil en la vida.